A partir del 1 de enero de 2023 los autónomos tenemos una nueva forma de cotización en función de nuestros ingresos reales. ¿Esto que implica?
Se trata de un modelo de cotización progresivo con 12 tramos de cotización. La cuota de autónomos viene determinada en función de la previsión de ingresos, por ello, los autónomos con menos ingresos pagarán una cuota inferior y los que más ingresen pagarán una cuota superior.
Se implementará de forma transitoria desde el año 2023 al 2025.
Este nuevo sistema que ha arrancado en 2023 con una cuota mínima de 230 euros y una máxima de 500 euros pero, en 2024 las cotizaciones irán desde los 225 euros a los 530 euros por lo que a lo largo de estos 3 años se irán adaptando a esta nueva forma de cotización.
Hay que tener en cuenta que, al finalizar el año, el autónomo tendrá que regularizar sus cotizaciones.
Esto quiere decir que tendrá que devolver o reclamar las cuotas en caso de que sus rendimientos netos definitivos se encuentren por debajo o por encima de lo indicado en sus previsiones anuales.
Los rendimientos netos se calculan restando a los ingresos brutos los gastos de la actividad deducibles (ejemplo, cuotas Seguridad Social, suministros, materiales, proveedores, etc.)
Os adjuntamos las tablas proporcionadas por la seguridad social en la que se puede ver esa diferencia de cotización a lo largo de los 3 años.
¿Y cuanto voy a pagar de cuota?
La cuota que deberás pagar es el 31,20% de la base de cotización.
Para el año 2023, la base de cotización mínima es de 950,98 € mensuales y la máxima de 4.495,50 € mensuales.
Hay que tener también en cuenta que en caso de que tus rendimientos previstos sean inferiores al salario mínimo interprofesional en cómputo anual, podrás elegir tu base de cotización dentro de una tabla reducida, siendo la base mínima 751,63 € mensuales.
Si te ha quedado alguna duda de cómo calcular tu cuota, ver opciones posibles o necesitas algún tipo de ayuda concierta una cita con nosotros o ponte en contacto a través de nuestras redes sociales.
